Siempre he sido una experta en inventar mundos imaginarios... mundos que nunca han salido de mi cabeza... No lo necesitaba... estaban ahí, con sus personajes, sus colores, sus historias, sus músicas imaginarias...
Me refugiaba en esos mundos inventados donde Malala Boo (a modo de Superman con Clark Kent) era la protagonista de mil historias fantásticas con final feliz... Y allí vivía lo que yo no me permitía vivir aquí, en el mundo real.
La verdad es que soy consciente de que durante más de 30 años he pasado por la vida intentando no estar... no sentir... no mostrar mi verdadero yo... intentando que nadie pinchara la burbuja de cristal que protegía mis miedos más profundos...
Pues señoras y señores al final la ha pinchado Malala Boo... ha querido salir de su burbuja y sus mundos de cuentos encantados... Ha fagocitado a la mujer irreal que todos conocían para mostrarse, para sentir y expresarse de verdad... Para pisar fuerte, para amar profúndamente y disfrutar de este mundo por el que estaba pasando de puntillas.
Malala Boo soy yo... bienvenidos a mi mundo real!
Guapísima Malala Boo!
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